El día que Pachuca llegó a la cúspide del fútbol de Sudamérica
Se cumplen 10 años del último y único gran logro de un equipo mexicano en el fútbol sudamericano
Juan Carlos Cacho no quería que una lesión en su muslo derecho le dejara fuera de la final. Su equipo, el Pachuca, disputaba por primera vez en su historia la Copa Sudamericana contra Colo-Colo. Era 2006. La ida se jugó en Hidalgo, en el centro de México, y terminó con un empate 1-1, allí Cacho dejó escapar un gol de cabeza. En la vuelta jugó el primer tiempo, aunque el dolor no le dejaba hacer mucho. Pidió su cambio. Y sus compañeros se encargaron de ganar el trofeo.
Hace 10 años, el Pachuca ganó el primer y único título a nivel Sudamérica que ha ganado un equipo mexicano. Alzaron la Copa Sudamericana, una símil de la Europa League. Lo hicieron en la noche del 13 de diciembre de 2006. En aquella ocasión, los tuzos – como se le conoce al club−, remontaron y ganaron 1-2 en un estadio Nacional abarrotado por hinchas del Colo-Colo. En el equipo chileno estaban los jóvenes Arturo Vidal, Matías Fernández y Alexis Sánchez. “¡A esos chicos les ganamos! Hicimos un gran partido. Era el mejor ambiente que he visto en un estadio. El fútbol que traía Pachuca era uno de los mejores”, dice Cacho a EL PAÍS.
El equipo hidalguense venció a férreos rivales. En los octavos de final golearon, en el marcador global, 6-3 al Deportes Tolima de Colombia; en cuartos 5-2 al Lanús argentino y en semifinales al Atlético Paranaense de Brasil por 5-1. Juan Carlos Cacho marcó cuatro veces. “Uno se pone como pavorreal cuando recuerda eso. Son de los torneos que siempre guardaré en el baúl de los recuerdos”, comenta el ahora ya exfutbolista de 34 años.
El Pachuca se quedó con la copa tras vencer 3-1 al Colo-Colo, en el marcador global. El equipo mexicano no era el favorito y eran escasas las esperanzas por trascender. Pero el dueño del club, Jesús Martínez, apostó por sus tuzos. “Ha sido uno de los mejores Pachuca de la historia”, afirma Cacho, quien logró dar un salto a la selección mexicana dirigida por Hugo Sánchez. Fue parte del plantel que se quedó con el tercer lugar en la Copa América de 2007.
En 2005 la Concacaf llegó a un acuerdo con la Conmebol para que los dos mejores equipos mexicanos en el torneo de liga compitieran en la Copa Sudamericana. El convenio sólo fue por cuatro ediciones y en la segunda, el Pachuca se coronó bajo el mando del entrenador Enrique Meza. Al siguiente año, el Club América fue subcampeón al perder frente al Arsenal de Sarandí. La principal razón para que los equipos mexicanos dieran un paso al costado fue para respaldar a la Champions de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe.
En noviembre pasado, el presidente de la liga mexicana, Enrique Bonilla, anunció que los clubes mexicanos dejarían de participar en la Copa Libertadores del próximo año debido a que el nuevo formato de la competencia continental se empalmaba con las fechas finales de la liguilla. De esta manera, a los clubes mexicanos sólo les queda la liga de campeones de la Concacaf para jugar. "No sé cuánto tiempo tenga que pasar para que alguien la gane [Copa Sudamericana y Libertadores]", comenta Cacho al respecto.
¿Dónde están los campeones?
De los futbolistas que jugaron aquella final en Chile, sólo siete se mantienen en activo. Se tratan del defensor colombiano Aquivaldo Mosquera, quien juega en su país con el Deportivo Cali. Christian Giménez se mantiene en el primer equipo de Cruz Azul, Damián Álvarez con Tigres y Carlos Rodríguez con Toluca, Leobardo López con Veracruz y Paul Aguilar en el Club América. Mientras que Fausto Pinto (Lobos BUAP) y Nicolás Saucedo (Correcaminos) juegan en la segunda división.
Gabriel Caballero, uno de los que anotó en la final de vuelta, es entrenador de Dorados y hace unas semanas ganaron el campeonato en segunda división. Mientras que Marvin Cabrera, Fernando Salazar, Jaime Correa, Andrés Chitiva, Juan Alfaro y Juan Carlos Cacho se retiraron. El guardameta colombiano Miguel Calero falleció el 4 de diciembre de 2012 a causa de una trombosis cerebral. El entrenador Enrique Meza fue despedido en octubre como estratega de Monarcas Morelia, un equipo que peleaba el descenso.
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